lunes, 9 de abril de 2012

Si te caes siete veces, levántate ocho

"Si te caes 7 veces, levántate 8". Proverbio Chino

Hace un tiempo llegó a mis manos está frase y fue muy reveladora. 
¿Por qué hay que gente que llega a lo más alto y otros que únicamente se dejan llevar?
¿Por qué nos resignamos? ¿Por qué a la primeras de cambios nos rendimos, desistimos? ¿Por qué no perseguimos nuestros sueños?, ¿Por qué?, ¿Por qué? y ¿Por qué?

Tienen cabida infinidad de preguntas pero, en casi todas, la respuesta sería similar: tenemos miedo a fracasar (ver post cuando el miedo deja de ser funcional). Este miedo es limitante y muchas veces ni siquiera nos hace fracasar porque ni siquiera nos hemos puesto a intentarlo. El hecho de no conseguir algo, afecta a nuestra autoestima personal y social, a nuestro autoconcepto. Pero, ¿qué consecuencias tiene no intentarlo?

Según Elsa Punset, en Brújula para Navegantes Emocionales, y cito palabras textuales: "a menudo es el miedo a sufrir el que dispara todas las alarmas y nos impide sacar partido de la parte más rica y positiva de nuestras emociones, encerrándonos en lo que le ego percibe como una derrota y una humillación. Cuando las personas aprenden a no confundirse con sus emociones o experiencias negativas, sino a verlas como acontecimientos potencialmente enriquecedores, como si de un juego de prestidigitación se tratase aprenden a sacar partido a la vivencia intensa y comprometida de las emociones negativas"


Ya comentamos esto en alguna ocasión pero, qué hace el niño para aprender a andar. Lo intenta y lo intenta hasta que lo consigue. Y ese ejemplo puede extrapolarse a cualquier ámbito.

Pequeños consejos que pueden ayudarnos:

1. No tengas miedo y si lo tienes no dejes que te paralice. Es difícil que las cosas se consigan a la primera y lo importarte es definir el camino y disfrutar del mismo. Saltar las piedras, sortear obstáculos y no olvidar nunca de que una vez empiezas, siempre estás más cerca de la meta que si no haces nada.
2. Céntrate en lo que quieres. Focaliza tu atención y no lo olvides. A veces, hay personas que no saben qué es lo que quieren pero quizás te ayude la siguiente pregunta "Si pudieses elegir y tuvieses todos los recursos disponibles, ¿qué sería lo que te haría feliz ahora mismo?"

3. Analiza los recursos que tienes y los que necesitas. No sirve de nada tirarse a la piscina si sabemos a ciencia cierta que está vacía.

4. Se flexible: puede ser que una parte de tu objetivo no sea del todo realista y sea necesario moldearlo un poco. En este sentido, puedes tener presenta el modelo de creatividad de Disney. Esto implica que en un primer momento, puedes no alcanzar lo que quieres pero entonces no desesperes, para un momento y piensa en todo el proceso, qué ha ocurrido, dónde se podía haber mejorado. Cuando lo hayas hecho, re define de nuevo tu camino y vuelve a empezar.

5. Ten paciencia. Lo importarte es no desistir, no ver los obstáculos como fracasos sino como retos y si en algún momento del camino te caes, no te preocupes, analiza por qué caiste y vuélvete a levantar con más fuerza. Es necesario ver con claridad cada paso del camino, así disminuiremos la posible frustración y podremos seguir con las fuerzas necesarias para continuar.

6. Confía en ti mismo. Quizás uno de los puntos más importantes porque todo lo anterior no sirve de nada si no crees en tus capacidades. En la inmensá mayoría de los casos, nuestro mayor enemigo somos nosotros mismos, ¡no lo olvides!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Déjanos tus Comentarios

Quizás pueda interesarte:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...